Tu Verdadera Esencia
Por Rosana Portelli
"Crear es desear, todo lo que tienes
en tu vida hasta el momento
es el resultado de tus deseos."
Rosana Portelli
No podemos imaginar un mundo libre de deseo. Hasta el deseo de no tener ningún deseo, ya es en sí mismo un deseo. Tus deseos, cultivados como semillas en el jardín de tu conciencia espiritual, pueden florecer en forma de libertad para poder tenerlos en paz y armonía con tu propio mundo.
Para hacerlo deberás utilizar tu mente para crear el mundo material exacto que concuerde con tu mundo interior que es donde se originan las experiencias del mundo físico. Es una ilusión el creer que te encuentras impotente ante las circunstancias de tu vida. La mentalidad de grupo te dice que eres incapaz de producir una manifestación. El pensamiento de grupo anula tu capacidad para crear tu propia vida.
Si analizas los conceptos y creencias que has incorporado en ti, verás que reflejan el pensamiento de tu familia cercana, y lejana, de tus amigos y educadores de tu comunidad, tu grupo religioso, tu nación, el grupo étnico, etc. Varias áreas de tu vida se ven condicionadas por disposiciones predeterminadas, que hacen que tu evolución personal sea más lenta porque aquello que realmente deseas o crees no obtiene ninguna energía. Al mantenerte conectado con una conciencia de grupo, estás diciendo en realidad: «Opto por evolucionar lentamente». Lo cual te lleva a sentirte débil e impotente.
Si comprendieras tu capacidad para la manifestación, te darías cuenta de que eres creador por naturaleza. Si te separas de esas fuerzas exteriores, verás cómo aumentará drásticamente la velocidad de tu evolución. Si escuchas una voz interior, que te dice: «Avanza», ya no aguardarás a esperar a alguien para avanzar, antes de dar el primer paso. Ya no intentarás obrar de acuerdo con la mentalidad del grupo, que está destinada a mantenerte seguro y a desanimar tu individualidad.
Tienes que desconectarte de tu programación y saber en tu interior que puedes aceptar y aceptarás el desafío de manifestar tu destino, eso es obrar de acuerdo con tu verdadera naturaleza.
La creencia de que eres un ente separado es lo que te lleva a sentirte frustrado e impotente ante la vida. Hay una fuerza universal que se encuentra en todas las cosas del universo. No hay un Dios separado de cada individuo, cada planta, cada animal, cada mineral. Todos son uno. En consecuencia, la misma fuerza divina que hay dentro de ti, que te hace pensar y respirar, se encuentra simultáneamente en todos los seres humanos y en todas las cosas incluido Dios. Es algo universal. Así pues, no existe lugar alguno en el que no esté. En consecuencia, lo que percibes como ausente de tu propia vida, también contiene la misma fuerza divina o inteligencia universal que está dentro de ti.
Por lo tanto, la manifestación de tu deseo, no es más que el dar forma a un nuevo aspecto de ti. No estás creando algo a partir de la nada sino que compartís la misma esencia. Esto constituye una parte muy importante de esta comprensión. ¡Tú y aquel que deseas manifestar en tu vida sois uno! Todo lo que existe está formado por esa energía divina y única.
Eres parte de la creación y como tal estás conectado y unido a todo, tu esencia en ultima instancia es divina como todo lo creado, si lo entiendes y sintonizas con ella, verás cómo tus deseos se manifiestan como tu destino en tu vida cotidiana. Finalmente, te convencerás de que tu tarea consiste en decir «¡Sí!», en lugar de preguntar «Cómo?». Dentro de ti mismo existe un poder divino para la manifestación y para atraer todo aquello que necesitas o deseas, recuérdalo siempre.
Tu destino depende sólo de ti. Que el amor llene tu ser.Rosana PortelliLife CoacherEFT-ADV
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